Propiedades del Jengibre
El consumo habitual de jengibre nos aporta los siguientes beneficios:
Antiinflamatorio y analgésico natural: el jengibre se recomienda en el tratamiento natural de enfermedades inflamatorias y/o dolorosas como la artritis, la artrosis, la fibromialgia o la fatiga crónica.
Digestivo: nos ayuda a tratar malas digestiones, flatulencias, gastritis, úlceras gástricas, diarrea, etc. Funciona también como protector estomacal ante el consumo de alcohol y medicamentos.
Afecciones de garganta: ayuda a tratar infecciones e inflamaciones de la garganta, y és muy útil en casos de afonía y para cantantes profesionales.
Náuseas y vómitos: especialmente recomendado en los primeros meses del embarazo, debido a que no ocasiona efectos secundarios ni al feto ni a la madre. También es un suplemento ideal durante la quimioterapia en el tratamiento del cáncer.
Ayuda a prevenir los mareos en los viajes
Aporta calor: el jengibre tiene un alto potencial calorífico, tanto si lo tomamos como si lo aplicamos externamente. Lo recomendamos especialmente a personas frioleras y épocas de frío. En épocas de calor deberemos tener en cuenta que puede aumentar la sudoración.
Acelera el metabolismo: esta propiedad calorífica también promueve que se acelere el metabolismo, muy útil si queremos perder peso.
Aumenta la líbido: el jengibre es un afrodisiaco natural. Recomendamos realizar un preparado de jengibre y canela en polvo con miel, y tomar una cucharada diaria.
Previene las enfermedades cardiovasculares y favorece la circulación: sin embargo, si se está tomando medicación puede interferir en su acción, por lo que deberemos consultarlo con el médico.
Lo podemos consumir de múltiples maneras:
Raíz cruda: la podemos rallar e incluir en recetas de todo tipo.
En polvo: para realizar un tratamiento recomendamos tomarlo en polvo para poder controlar la dosis. Recomendamos no superar la dosis de 2 gramos diarios y consultar siempre con un terapeuta profesional.
Confitado: el jengibre confitado es fácil de encontrar hoy en día en herbolarios, dietéticas o tiendas deliciosas. Deberemos tener en cuenta que tiene un alto contenido de azúcar.
En infusión: En infusión caliente es ideal para personas frioleras.
Jugo fresco: el jugo fresco de jengibre, sin abusar, nos permite dar un toque original y medicinal a jugos de manzana, piña, zanahoria, etc.
Aceite esencial: si lo conseguimos en aceite esencial podemos usarlo para dar masajes y, por ejemplo, para los pies fríos. Lo mezclaremos con nuestra crema hidratante habitual y masajearemos bien los pies. En poco rato notaremos el gran calor que desprenden.