Se clasifica como “frutas del bosque”, así como las fresas, cerezas, frambuesas, etc. Los arándanos pueden ser rojos o azules/púrpura y, dentro del grupo “frutas del bosque”, son uno de los más saludables, los que más beneficios nos ofrecen.
1. Beneficios para la piel
Al principio, al contener muchísima vitamina C, el arándano produce colágeno, importante para evitar el envejecimiento prematuro.
Además, consumir una ración moderada de arándanos en distintas recetas o solos, ayudará a sanar afecciones en la piel: quemaduras, eczemas, cortes pequeños, manchas, acné y cualquier otra de leve gravedad. Todo eso por su propiedad antioxidante y por brindarte vitamina K.
Nos referimos a consumir arándanos, no a la aplicación sobre heridas. Eso sería perjudicial y podría infectarse. Es decir que solo pueden comerse. Regresando a eso, también te ayudará para reducir inflamaciones. Sobre los eczemas te recomendamos consultarlo con tu dermatólogo para que este te indique un tratamiento específico. Lo que sí es seguro, es que los arándanos (cuando no eres alérgico) puede reducir la aparición de afecciones.
2. Beneficios para los riñones
Una infección de orina puede tratarse fácilmente si acudes al médico. Sin embargo, si te tardas en buscar ayuda profesional, tal infección podría producir cistitis (imposibilidad y ardor al orinar) y en casos más graves, infectar los riñones. Para no llegar a tal caso, es importante tomar jugo o batidos de arándanos ya que estos tienen flavonoides.
¿Y qué pasa con este tema del color? Recuerda que existen arándanos rojos y azules, cualquier de los dos te hará bien. El tema del flavonoide es esencial para evitar las infecciones urinarias. También podrías tomarlo para aliviarla si ya la padeces. ¡Así que a tomar jugo de arándanos para la salud renal!
3. Beneficios para la diabetes
Según estudios científicos los arándanos podrían reducir las posibilidades de padecer diabetes tipo 2. ¿Por qué? Pues los arándanos, en comparación con otras frutas (manzanas, ciruelas, peras, etc.) previene en un 33% la patología.
Aquí es donde debes tomar precaución. En este caso sobre la prevención de la diabetes tipo 2, se refiere al consumo de la fruta entera, nunca en jugo. De hecho, el jugo de arándanos tendría el efecto contrario, ¡Así que mucha cautela con eso!
4. Beneficios para la vista
Por ser rico en vitamina A, el arándano se convierte en una fruta perfecta para mantener la salud visual. Al integrarlos en nuestra dieta, reduciremos una posible fatiga ocular y hasta prevenir la patología de ojos secos. Esto último es muy común cuando se usan lentillas o lentes de contacto. Todo eso es gracias a los flavonoides antocianinas (químicos vegetales muy positivos).
Ahora, ¿qué pasaría en el caso de ya presentar una patología ocular como las cataratas? Los arándanos protegerán al ojo porque contienen mucho colágeno, uno que repara las células, las fortalece para que nuestros ojos no sufran. Incluso, la ceguera puede prevenirse al consumir arándanos constantemente.
5. Beneficios para el sistema nervioso
El estrés, la ansiedad y la depresión parecen aumentar cada vez más en la población por diversas causas: desde la genética hasta las provocadas por el entorno. ¿Cuál es el rol de los arándanos aquí? Para empezar, ayudan mucho para mantener la memoria a largo plazo y eliminar el estrés gracias a la vitamina C. Segundo, los arándanos son ricos en potasio; necesario para la generación de impulsos nerviosos.
Y, finalmente, son muy buenos cuando se sufre de un trastorno ansioso-depresivo, ya que las frutas del bosque como en el caso de los arándanos, son ricas en nutrientes específicos perfectos para reducir los niveles de ansiedad.