
Cerca de las 4 de la mañana, el cajero fue explotado por tres delincuentes que lograron hacerse del dinero, como consecuencia de la propia explosión, se dispersaron multitud de billetes en el suelo.

La policía presume que son las mismas personas que en la jornada del martes hicieron explotar un cajero en el Buceo, pero que no habían podido robar el dinero.
La respuesta policial fue instantánea y se produjo un tiroteo en el lugar, pero finalmente los delincuentes lograron escapar dejando algunos elementos de los que utilizaron en el camino de fuga.