Las inversiones financieras son un proceso que permite comprar activos que tienden a aumentar su valor con el tiempo, permitiendo obtener rendimiento del capital invertido, es decir, generan ganancias.
En el mercado actual, se puede invertir en diferentes instrumentos financieros como acciones, bonos, divisas, criptomonedas, fondos de inversión, materias primas, metales preciosos, etc. También, es muy común invertir en bienes inmuebles.
Para invertir con menor riesgo, es necesario investigar el activo que se desea comprar, para tomar una decisión informada basada en el rendimiento del activo y su proyección de mercado, así como en los objetivos y capacidad económica del inversionista.
Toda inversión debe supervisarse de forma cotidiana, ya que su rendimiento a lo largo del tiempo puede verse afectada por los acontecimientos que suceden en los mercados mundiales, los expertos indican que las inversiones brindan beneficios a largo plazo si se toman decisiones informadas, se evalúan los riesgos y se tiene una cartera diversificada.
Tipos de inversiones financieras: por Francisco Obes Contador
Entre los principales tipos de inversiones financieras se encuentran:
- Acciones: invertir en acciones implica comprar unidades de propiedad (acciones) de una empresa que se cotiza en la bolsa de valores, los beneficios se obtienen cuando el valor de la acción sube en el mercado. Una forma de diversificar la cartera de acciones es invertir en acciones cíclicas y acciones defensivas.
- Acciones cíclicas: el valor de este tipo de acciones tiende a subir y a bajar en función del crecimiento económico, suelen brindar mayor rendimiento en periodos de prosperidad económica, cuando los inversionistas se sienten optimistas.
- Acciones defensivas: este tipo de acciones tiende a mantener su valor independientemente del ciclo económico, los inversionistas las usan como un medio de protección de la cartera de inversiones.
- Bonos: son un instrumento de renta fija, se trata de una inversión de deuda a través de la cual se presta cierta cantidad de dinero a una entidad (gobiernos, empresas, entidades financieras, etc.) por un periodo de tiempo determinado, finalizado este periodo, la entidad devuelve al capital (costo del bono) más los intereses devengados.
- Fondos de Inversión: es un medio de inversión que reúne el dinero de diversos inversores, para invertirlo de manera conjunta en activos financieros como acciones, bonos, materias primas, etc., el valor del fondo de inversión depende en forma directa del valor de los activos que lo conforman.
- Fondos de Inversión Cotizados (ETF, Exchange Traded Funds): al igual que los fondos de inversión, están conformados por una cesta de valores como acciones, bonos, materias primas, criptomonedas, etc., cada participación refleja la composición del activo a que hace referencia. Se cotizan en la sesión bursátil y los inversores pueden comprarlos en tiempo real.
- Materias primas y metales preciosos: son activos muy útiles para diversificar la cartera de inversiones, las materias primas se utilizan generalmente como cobertura en periodos de recesión, debido a su ciclo económico. El oro es utilizado a nivel global como un activo refugio.
- Bienes inmuebles: las propiedades inmobiliarias como edificaciones y terrenos son un tipo de inversión financiera muy usual, debido a la revalorización del activo a través del tiempo.
Cómo diversificar la cartera de inversiones
La diversificación de la cartera de inversiones busca aumentar la rentabilidad minimizando el nivel de riesgo que se debe asumir para obtener ganancias. Para ello, se busca neutralizar el efecto de las posiciones que presentan rendimiento negativo.
Esto permite que en caso de presentarse un periodo de recesión económica y algunas posiciones comiencen a dar pérdidas, otros activos de la cartera podrán mantenerse, e incluso, incrementar su valor. Al operar con inversiones financieras se enfrenta diversos tipos de riesgos que se clasifican en:
- Diversificables: la exposición a este tipo de riesgos varía en función de la naturaleza del activo, el sector, el marcado o la región o país donde opere, se pueden reducir aplicando una estrategia de diversificación, es decir, se invierte en diversos activos para mitigar el impacto del riesgo del capital.
- No diversificables: este tipo de riesgos, conocido como riesgo sistemático, está asociado al activo o empresa, independientemente del sector, mercado, región o país donde se opere. No es sencillo identificar o prevenir este tipo de riesgos, por lo que los inversores deben asumirlo antes de abrir una posición.
Como no todos los riesgos son diversificables, los inversores deben conocer la exposición de su cartera a los diferentes riesgos y buscar la forma de proteger su inversión, para ello, los inversores deben:
- Elegir el tipo de activos: es esencial distribuir la inversión en distintos tipos de activos y centrarse en diferentes mercados.
- Abrir las posiciones: luego de seleccionar los activos y elegir los mercados donde se operará, es necesario abrir las operaciones.
- Supervisar el crecimiento y salud de la cartera: el inversor debe asegurarse de supervisar y evaluar su cartera de inversiones de manera periódica, para asegurarse de se mantiene equilibrada, es decir, que mantiene la exposición que desea tener, sin afectar su tolerancia al riesgo.
