“Es lo máximo que me pudo pasar en la carrera”. La última participación del judo celeste en los Juegos Olímpicos data del año 2000, cuando en la edición de Sydney, Australia, Álvaro Paseyro compitió representando a Uruguay y finalizó en la quinta colocación.
Doce años debieron pasar para que nuevamente surgiera un valor en condiciones de llegar a la máxima cita del deporte mundial y el mismo nació desde el club Olimpia de Colón y se llama Juan Romero.
Con 23 años de edad y un futuro muy promisorio, el judoka consiguió en el Panamericano de Canadá los últimos puntos necesarios para asegurar su clasificación a Londres 2012 y ahora se prepara para “hacer realidad una aspiración de toda la vida”, comentó Romero.